Esta parece una historia de Disney, pues sólo en ese mundo de ilusiones, los leones pueden ser amigos de animales pequeños o provocativos (como Timón y Pumba). Se trata de un león que al igual que Simba, tuvo que crecer junto a un animal bastante opuesto a él: un perro salchicha. Esto sorprendentemente los llevó a convertirse en grandes y extraños amigos.
El diminuto salchicha de siete años y el león de cinco se criaron juntos en el Zoológico de Vinnevude, Oklahoma, EE.UU.
Hacen absolutamente todo juntos. Incluso bañarse.
Curiosamente el líder de la “manada” es el salchicha. Desde el principio él asumió el papel y decidió adoptar y cuidar al león quien nació con una leve parálisis.
0 comentarios
Publicar un comentario